miércoles, 5 de agosto de 2015

CON UNA BANDERA BLANCA


Me gusta que te enfades
cuando yo no soy la causa
sino solo tu calmante.

Y la furia es bienvenida
si te desquitas conmigo,
si soy tu reina mimada.

Te entiendo tan solo un poco
o eso finjo cuando duermo,
y si despierto te encuentro

Tumbado sin preocuparte
que ha pasado por tu mente
casi diez minutos antes.

A veces finjo entenderte
menos de lo necesario
para que me abras los dientes

Y decidas acercarte
con una bandera blanca
que dentro lleve mi nombre.

Y te rindes divertido
porque sabes que te quiero
si me pongo mi vestido.

Y conviertes en hogar
todo lo que vas tocando
y susurrando al oído.

No hacen falta las cadenas
que yo me quedo a tu lado
porque crees en las sirenas.

Porque gustas de imposibles
que nacieron en mi mente
y siempre me hiciste libre.

Porque a veces 
yo también saco mi bandera
para rendirme en tu norte.

                   Cristina López.



No hay comentarios:

Publicar un comentario